El club Diarco vuelve al campeonato mundial ofocioso de Sala
Nimes 2017
Nimes tiene duende. La bella ciudad francesa situada cerca de la desembocadura de Ródano siempre ha sido un lugar de encuentro entre los pueblos de Europa. Nemoussos, como era conocida en la época romana esta ciudad, fue un cruce caminos entre todo el Imperio. El espíritu romano de esta ciudad aún puede admirarse entre varias joyas de su arquitectura romana como su esplendoroso anfiteatro o la Maison Carrée.
Ese incomparable marco romano acoge año tras año un torneo internacional de tiro con arco. Nimes alberga una de las etapas del World Archery Indoor Championships, el campeonato mundial de sala que también se celebra en Marraketch, Bangkok y Las Vegas. Desde hace ya más de 20 años el Club de Arco de Nimes organiza esta prueba en la que cientos de arqueros y arqueras se juntan para rendir culto al arco.
Esta decimonovena edición ha reunido a más de 1200 atletas de más de 40 naciones de prácticamente todos los continentes. Durante tres días este torneo de tiro con arco concita la atención de los mejores arqueros americanos, asiáticos y europeos. Al mismo tiempo Nimes es una prueba popular en la que cientos de aficionados, amateurs o jóvenes promesas se citan junto con sus estrellas para disparar con atención sus flechas sobre la complicada diana conocida como “triple vertical”.
En esta edición el club Diarco ha contribuido a la fiesta del arco con la presencia de once arqueros y arqueras que han participado con alegría, ánimo y deportividad. Javi, Alfonso, Pedro, Koro, Nieves, Maite, Beñat, Josu y Maider, en la modalidad de arco recurvo, y Aitor y Endika, en arco compuesto, han competido por el “duende” en Nimes con unos excelentes resultados.
Los “once” de la marea azul han podido acompasar sus flechas con las de coreanos ilustres como Oh, Gye o, el medalla de oro, Ku Bonchan. Figuras del arco como el “poleas” Stephan Hansen, el campeón del torneo el francés Valladont o, la estrella indiscutible, el tejano Brady Ellison, han compartido sonrisas con estos entusiastas arqueros de la marea azul del Club Diarco.
Allí se han dado cita deportistas de otras comunidades que admiramos como Miguel Alvariño, Sergio del Olmo, Miriam Alarcón o Andrea Marcos. También compañeros y compañeras con los que hemos compartido buenos momentos como los baleares, gallegos, madrileños y castellano leoneses. Mención especial merecen nuestros colegas navarros que saben aunar a un buen grupo de arqueros dispuestos a demostrar su buen hacer.
Hemos echado en falta a los ausentes de última hora como Manu, Aimar o Andoni. Estamos seguros de que esta marea azul va a seguir aumentando año tras año en esta cita internacional. También estamos seguros que la expedición azul en poco tiempo va a darnos muchas alegrías tanto en el arco recurvo como el compuesto.
Esta expedición azul sirve para comprender que el Club Diarco es más que tirar flechas para ganar. Es una forma de entender la vida. No se trata únicamente de lograr buenos resultados. Nuestros valores van más allá. Diarco no renuncia al compañerismo, a la diversión y a llevar el nombre del deporte donostiarra, de Gipúzkoa y de Euskadi, con responsabilidad, honestidad y humildad. Tendremos días de gloria, sin duda, pero el encanto de este Club es algo que va m
ás allá que el triunfo. Es practicar este noble deporte con tus compañeros y compañeras entre estrellas internacionales, es pasear con ellos entre las joyas romanas de Nimes. Es saber disfrutar del duende de Nimes.